Encarrilado de un convoy de metro en un túnel

 

 

Encargado por: GVB
Ubicación: Países Bajos

 

La empresa municipal de transporte holandesa GVB es la encargada del transporte público en la ciudad de Ámsterdam y sus alrededores. Diariamente, unas 850.000 personas usan los servicios de metro, tranvía o ferry de GVB.

La nueva línea 52 del metro de Ámsterdam, conocida como línea Norte/Sur, comenzó a funcionar en 2018: esta línea va desde la estación Ámsterdam Norte, ubicada bajo el casco histórico de la ciudad, hasta Ámsterdam Sur. Tiene una longitud de 9,7 kilómetros, 7,1 de los cuales transcurren en vías subterráneas.

 

Volver a poner sobre las vías un convoy de metro o tranvía es un trabajo muy meticuloso, que requiere una gran cantidad de tiempo. Con la apertura de la línea Norte/Sur, el descarrilamiento de cualquier vehículo en esta línea supondrá un desafío muy importante, teniendo en cuenta el reducido espacio de trabajo dentro de la sección de túnel. GVB buscaba un sistema de encarrilado que se adaptase a sus necesidades concretas, y les permitiese trabajar con toda rapidez y seguridad en el tramo subterráneo de la línea Norte/Sur.

 

Tomando como base el sistema de encarrilado existente, Holmatro desarrolló, de forma específica para el cliente, un sistema flexible y que se ajusta a las medidas de la plataforma de la vía subterránea y al limitado espacio de paso existente a ambos lados.

 

De esta forma, se creó para GVB un sistema especialmente ligero y flexible, que consta de dos bombas dobles, controladas por dos consolas de control individuales. Ambas bombas de 220 V están equipadas con asas de transporte en su carcasa, lo que hace realmente sencillo su desplazamiento por un par de personas. Las consolas de control son plegables, por lo que ocupan muy poco espacio. La consola de control A se ocupa de controlar los cilindros de elevación, así como el cilindro transversal, y está concebida para descarrilamientos ligeros y normales. La consola de control B controla dos cilindros de elevación adicionales, que proporcionan más capacidad de elevación durante los trabajos de encarrilado más difíciles. Ambas consolas de control se pueden manejar por separado o de forma simultánea. Para contar con una mayor seguridad, la consola de control A está equipada con cuatro válvulas y una palanca selectora, para evitar que el usuario realice una elevación y un movimiento de deslizamiento al mismo tiempo. La herramienta puede colocarse fácilmente en la plataforma de la vía subterránea bajo el metro gracias a las vigas hechas a medida, de altura reducida.

 

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